Si alguien cree que está limitado por su género, raza u origen, se volverá aún más limitado.
Carly Fiorina
Porque Madrid, en realidad, no es nada especial. No tiene un gran río. Ni apenas rascacielos. Ni canales, ni lagos. Ni gloriosas ruinas. Ni mar. A Madrid le faltan muchas cosas. Pero tiene la gente por las calles. El rincón inesperado. La variedad. El contraste. La animación constante. Y sus costumbres. Vale la pena levantarse temprano, por una sola vez, para vivir un día la vida de Madrid.